martes, 14 de octubre de 2014

El fruto de su trabajo

El fruto de su trabajo
Rick D. Stuart

Memorias de un observador casual...
El anuncio prometía salarios elevados y viajes exóticos. ¡Prestor Mec pronto averiguó lo que eso significaba en términos hutt! Significaba trabajar 10 horas al día como un esclavo en una mina radiactiva de Sabrin para un puñado de matones que obtenían los elevados salarios y vacaciones fuera del planeta cada mes.
Pero Prestor Mec era un superviviente. Le habían engañado. No hay problema. Limítate a permanecer alerta, mantén la serenidad y saldrás a flote. Prestor consiguió su primera gran oportunidad cuando supo de una fuga que algunos de los otros mineros estaban planeando. Unas palabras a la gente adecuada, y los líderes del grupo desaparecieron en silencio. Tenía que admitir que el trabajo de supervisor era mucho mejor que partirse el lomo en los pozos. Pero Prestor no iba a pasarse sus últimos días pastoreando a unos cuantos estúpidos mineros. ¡No, señor! Tenía ambición e inteligencia para seguir ascendiendo.
Tardó un tiempo, pero Prestor encontró la ocasión cuando el jefe Denedin comenzó a sisar parte de los beneficios de la vieja Lady Sabrin en la mina Número 12. No mucho, claro. Un punto porcentual por aquí, otro por allá. Apenas lo suficiente para hacer que pareciera que la productividad caía debido a las enfermedades de las minas. Bueno, todo el mundo tiene enemigos, ¿no? Prestor no tardó mucho en averiguar quién se la tenía jurada a Denedin para sembrar sus semillas.
Bueno, el jefe Denedin obtuvo una “jubilación anticipada”, ¿sabes? Y Prestor, bueno, pensaba que tenía la galaxia por el mango. Pero sólo había un problema. Prestor olvidó que la primera ley de un matón es “nunca confíes en nadie”. Desde luego, Prestor se había librado de Denedin. Pero todo el mundo tiene algo que quiere mantener en secreto, ¿verdad? El sustituto de Denedin creyó que tal vez Prestor también tenía algo para usar en su contra. Tal vez Prestor era un poco demasiado ambicioso para ser un ex minero. Esa línea de razonamiento llevó de forma natural a la segunda ley del matón: “ocúpate de ellos antes de que ellos se ocupen de ti”.
Para abreviar, encontraron el cuerpo de Prestor arrojado a un pozo abandonado, en el exterior de la cantera número ocho, la semana pasada. Dicen que tenía un buen montón de créditos en el bolsillo cuando lo encontraron. Supongo que eso viene a demostrar que los créditos no pueden comprarlo todo en la galaxia...

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