Las hazañas
de Han y Chewie
Michael Allen
Horne
El siguiente
texto son fragmentos de una entrevista entre Voren Na’al, Director de
Investigación del Consejo Interno de la Nueva República, y el general retirado
Han Solo, cuando Solo estaba descansando con su familia en Nuevo Ralltiir. Se
añaden comentarios ocasionales de Chewbacca, el mejor amigo de Solo, y de Leia
Organa Solo, su esposa.
Solo:
¿Está grabando ya esta cosa?
Na’al:
Ahora sí.
Solo:
Entonces, ¿qué es lo que pretende averiguar aquí? Quiero decir, todo eso fue
hace años, mucho antes de su altecísima...
Na’al: ¿Altecísima...?
Solo:
Sí.
Na’al:
Ah... Bueno, en cualquier caso, lo que pretendo es que me dedique un tiempo y
me resuma lo mejor que pueda los principales hechos, personas y lugares del Sector
Corporativo que se encontró antes de alistarse en la Alianza Rebelde.
Solo:
¿Has oído eso, Chewie? ¡Nos alistamos!
Chewbacca:
(Ruge una carcajada)
Solo:
Bueno, en cualquier caso, supuse que realmente necesitaba un cambio de ritmo.
Llevaba viendo siempre las mismas caras y haciendo portes para prácticamente
los mismos peces gordos de los sectores corellianos, en el espacio hutt... los
sitios habituales.
Na’al:
Como la Luna del Contrabandista, Nar Shaddaa, ¿correcto?
Solo:
Sí. Chewie y yo conocemos hasta el último rincón de ese lugar, y nunca me ha
gustado demasiado trabajar para los hutts... tarde o temprano, si te quedas en
Nar Shaddaa, acaban poseyéndote.
Na’al: Irónico,
si se piensa en ello, ¿eh?
Solo:
...Muy divertido, chaval.
Chewbacca:
(Intraducible)
Na’al:
Lo siento, hmm, no pretendía, uh, despertar ningún mal recuerdo.
Solo:
Oh, no te preocupes. Bueno, ¿por dónde íbamos?
Na’al:
Eligió trasladarse al Sector Corporativo...
Solo:
Ajá.
Na’al:
¿Hubo alguna otra motivación para que abandonara Nar Shaddaa?
Solo:
¿Eh?
Na’al: Bueno,
la Consejera Organa Solo ha mencionado una antigua novia en su reciente regreso
allí y me preguntaba...
Solo:
¿Qué te preguntabas, chaval? ¡Eso son asuntos privados! ¿Por qué no te vas a
fastidiar a otro...?
Na’al:
Lo lamento, no pretendía ofenderle.
Solo: Aún
sigues vivo, así que no me has ofendido. En cualquier caso, eso es historia
antigua. Hablando de historia, ¿no tienes otras cosas de las que preocuparte?
Na’al: En
serio, no pretendo entrometerme.
Solo:
Será mejor que sigamos con esto. Salla y yo somos historia antigua. Los
contrabandistas no somos muy dados a mantener correspondencia. Ves muy a menudo
a alguien, genial, y luego no le ves durante algunos años, también genial.
Fíjate en Lando y yo. No nos habíamos visto en años y cuando llegamos a Bespin
fue justo como en los viejos tiempos... Bueno, en cualquier caso, Chewie y yo
queríamos algún nuevo escenario.
Na’al:
¿Qué piensa del Sector Corporativo, en general?
Solo:
Buen lugar para gastar tus créditos.
Na’al: ¿Y
qué más?
Solo: No
mucho.
Na’al:
Descríbame algunos de los principales eventos que le ocurrieron en ese tiempo.
Solo:
Bueno, para empezar, fuimos a Etti IV, que es uno de los principales mundos del
Sector. En primer lugar, se quedaron con todo nuestro dinero. Como probablemente
ya sepa, no aceptan nada salvo sus propios cheques y esos vértices cristalinos.
Después, fue la molestia de registrar el Halcón con todos los identificadores de
nave falsos que teníamos preparados. Eso fue realmente peliagudo y no nos
quedaba otra opción. En el Sector, son no tienes un identificador de la ASC –es
decir, la Autoridad del Sector Corporativo-, es como si pidieras a gritos que
te arrojaran a las cárceles de esclavos.
Etti IV está bastante bien para ser un mundo
Corporativo. No tan aséptico como otros. Allí realmente puedes pasar un buen
rato. Allí no son tan estirados como en otros lugares. En sentido relativo,
claro.
En cualquier caso, comenzamos a escuchar los
chismes. Descubrimos que un tipo, llamado Gran Bunji, está buscando pilotos
experimentados para transportar algunos cargamentos de raíz chak. La Autoridad
no se limita a imponer tasas en los bienes, como el Imperio. La Autoridad controla el mercado. Venden su propia
basura de invernadero y cobran cifras desorbitadas por ella. Hay un gran mercado para el material de
calidad. Grandes beneficios por unos pocos viajes. Naturalmente, estábamos
interesados.
Por supuesto, Bunji no menciona que se supone que
debemos transportar la carga a Gaurick, donde la mayor parte de los trabajadores
locales forman parte de una especie de secta que ostenta el control. Y trajeron
un mufti con ellos para supervisar... oh, disculpa. Un mufti es uno de sus
sumos sacerdotes o algo así. No sólo no aprueban la raíz chak, sino que no
beben otra cosa que agua y no comen nada sabroso. Los lugareños también se
muestran ansiosos de dar una lección a cualquiera que “destruya la moral de la
sociedad”... es decir, de cualquiera que use o transporte raíz chak.
Bueno, baste decir que las cosas se pusieron
interesantes. El primer viaje fue sencillo. El siguiente trabajo, lo mismo. Le
digo que esta vez me recibirán mejor... sin suerte. Bunji dice que dobla la
tarifa. Incluso nos ayuda a obtener una nueva identificación, el Franquicia Luchadora de Soles, y todo lo
necesario. Y, una vez más, cada vez es más difícil entrar y salir. Entonces –en
el siguiente viaje-, salimos de la Gran L...
Na’al: ¿La
qué?
Chewbacca:
(Regresa de la cocina con un enorme
bocadillo de chudde y orxtle. Ruge, intraducible.)
Solo: (A Chewbacca) No, supongo que ya no lo
enseñan. (A Na’al) Ya sabes, la
barrera de la luz.
Na’al:
Oh. Continúe, por favor.
Solo:
Bueno, salimos y nos encontramos una nave de piquete. Me figuro que podemos
arrojar la carga, mostrarnos dóciles, fingir inocencia, sobornar al tipo.
Chewbacca: (Ruge)
Solo:
Exacto, socio. Ni siquiera trataron de abordarnos. Demonios, hasta el Imperio
empieza abordando tu nave, ¿verdad? Pues estos graciosos no. Abren fuego sobre
nosotros. Vaya, se dedicaron a hacer prácticas de tiro durante un rato. Con
nosotros como diana. Preparamos el salto y nos fuimos sin recibir demasiados
daños en el casco.
Ahora llega la gran sorpresa. El bueno de Bunji se
disculpa. Dice “no hay problema”. Se encargará de todos los problemas, lo
arreglará todo. Hasta entonces hemos estado trabajando por un anticipo:
servicios ofrecidos a cambio de una línea de crédito con él. Nunca llega a
mencionar que las reparaciones salen de nuestro salario. Supongo que tenemos un
contrato de larga duración y que estamos amasando unos buenos créditos. Y
entonces me pasa la factura. ¡Le debemos un par de cientos de miles de
créditos! Afirma que eso es lo que cuestan las reparaciones, y ahora tendremos
que hacer gratis nuestros próximos
viajes sólo para devolver la deuda extra. ¿Adivinas lo que le dije?
Na’al: ¿Qué
se comiera un insecto vox?
Solo:
Hm, esa es buena. No, le dijimos...
Na’al:
Sí...
Solo:
...¡Claro! Lo pasado, pasado. ¡Nos encantaría
seguir trabajando para ti!
Na’al:
¿En serio?
Solo:
Eso es lo que él cree. Matamos el tiempo en su base. Un puñado de cúpulas en un
pequeño asteroide rocoso. Cuando el Halcón
está listo...
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
¡Cierto, ni siquiera pudimos darle una nueva mano de pintura! Bueno, nos
preparamos para otro viaje a quién sabe dónde. A algún lugar del que la mayoría
de sus hombres ni siquiera habían oído hablar. Bueno, despegamos
tranquilamente, pero aquí llega lo divertido. En lugar de salir a órbita,
descendemos sobre la cúpula de Bunji y Chewie abre fuego con los cañones
ventrales.
Na’al:
¿Bunji murió?
Solo:
No. Pero si hubiera sido así se lo habría merecido. Chewie y yo ya no volvimos
a ver ni un driit más de Bunji, pero al menos se corrió la voz para que nadie
volviera a tomarnos por tontos. Nos metimos en algunas deudas importantes
después de eso, porque Bunji ni siquiera terminó de arreglar bien el Halcón. Contrajimos algunas deudas
importantes por préstamos de Ploovo Dos-Por-Uno. Tuvimos que hacer algunos
trabajos para él.
No era mucho mejor que el Gran Bunji. Si te pones a
pensarlo, no era mucho mejor que algunos de los hutts de los que he oído
hablar. No era tan inteligente, pero cada vez que me reunía con él, me marchaba
contándome los dedos y ansiando un baño. Le pagué hasta el último crédito que
le debía, sólo que a mi ritmo. Aparentemente, eso le fastidiaba. Le hacía
perder reputación ante sus acreedores. Como si necesitara ayuda para tener mala
reputación.
Ploovo y yo finalmente nos separamos después de un
trabajo de contrabando de armas en Duroon. ¿Por qué esos tipos nunca pueden
hacer un trato limpio? Cuanto más te cuentan del trabajo y más te pagan sin
rechistar, más cosas te ocultan de la visión general del asunto. Apuesto que
Talon Karrde nunca dirige sus operaciones de forma tan turbia. Por alguna
extraña razón, a todos los jefes mafiosos, incluyendo unos cuantos de los peces
más gordos en el negocio del crimen a nivel galáctico, les encantan los juegos
mentales. Les hace creer que son importantes.
En todo caso, por esa época, la Autoridad estaba
instalando sus nuevos equipos sensores, unas bellezas de largo alcance de
verdad. Tuvimos problemas para escapar de algunas naves piquete. Dado que el
Sector está bastante centralizado, sólo hacen falta un par de días para que se
transmita un Formulario de Transgresión de Tasas a todas las naves de que
disponen.
Y Ploovo informó sobre nosotros. De todas formas se
lo hicimos pagar bien. Apuesto a que sus ropas favoritas aún apestan. Por
supuesto, necesitábamos identificaciones nuevas, lo habitual. Y como puede que
ya hayas descubierto, para moverte por el Sector hace falta más dinero que en
el Imperio. La rutina habitual.
Na’al:
¿Cómo consiguió que la nave resultara aceptable para la Autoridad?
Solo: En
esas ocasiones, lo único que puedes hacer es ir a un especialista. Puedes
encontrarlos allá donde vayas. Técnicos fuera de la ley, como Shug o Doc. En
este caso, fue Doc. Traté con él y con Jessa, su hija. Tengo muchos buenos
recuerdos de esa época... (En este
momento, el general Solo se queda mirando fijamente al entrevistador)
Na’al:
¿Qué? ¡No he dicho nada!
Consejera
Organa Solo: (Entrando en la sala)
¿Recuerdos culpables, Han? (A Na’al)
No deje que le intimide. Le gusta cultivar esa imagen de tipo duro.
Solo:
Eh, soy un tipo duro.
(Chewbacca
suelta una risita y sale de la habitación)
Na’al:
Si este es mal momento...
Solo y
Organa Solo: (Al unísono) No,
claro que no.
Solo: ¿Por
dónde iba? Ah, sí. Fuimos a donde Doc, pero no estaba allí. Así que decidí que
Chewie y yo...
Organa Solo:
(Ríe)
Solo:
Bueno, el caso es que Chewie y yo hablamos con Jessa. Ella se temía,
acertadamente como luego supimos, que la Autoridad estaba detrás del asunto.
Solo que no lo dijo abiertamente. Hicimos un trato para ayudar a ese académico
en Orron III y conseguimos las reparaciones y la nueva identificación.
No teníamos ni idea de en qué nos estábamos
metiendo.
Na’al:
Por favor, ¿podría contarme más de sus acciones con la resistencia del Sector?
Nuestros agentes sullustanos sugieren que puede haber algo de potencial si tan
sólo supieran con quien contactar.
Solo:
Eh, espera una Unidad de Tiempo Estándar. Para empezar, no existe ninguna
resistencia. Ni de lejos. La gente codiciosa convierte a los pobres en
insurgentes.
Na’al:
Eso he notado.
Solo:
Bien. En todo caso, 99 de cada 100 tíos que tienen un problema con el Sector sólo
están molestos porque aún no han sido sobornados. En el Sector hay pocos héroes
y muy dispersos.
Na’al:
¿Pero no trabajó con un equipo de asalto triani?
Solo:
Técnicamente, sí. Pero sólo porque los triani son buenos luchando por lo que es
suyo. Pero ellos no viven principalmente en el Sector. Trataban de obtener el
control de un par de mundos... difícilmente comparable a lo que intentamos
hacer nosotros.
Na’al:
Ya veo. ¿Pero les ayudó a rescatar a un camarada?
Solo:
Bueno, tengo que atribuir el mérito a quien se lo merece. Era Rekkon quien
realmente se merecía el crédito por todo eso.
Na’al:
¿Esto tendría que ver con el ataque a las instalaciones del Confín de las
Estrellas?
Solo: Sip.
Sólo que no fue un ataque, fue algo más parecido a una revuelta. Cortamos la
energía... de un modo realmente interesante. Ellos hicieron el resto. Doc lo
tenía todo organizado. Claro está, teníamos a los mejores con nosotros... ojalá
Rekkon hubiera tenido la oportunidad de ver cuánta razón tenía desde el
principio.
Na’al: ¿Era
el académico? ¿Qué clase de hombre era?
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo: En
eso tienes razón. Era un gran hombre. En serio, la mayoría de nosotros se pasa
la vida tratando de conseguir realizar algo, de encontrar un propósito. Él
había logrado eso y más. Era uno de los mejores seres que he conocido jamás.
Cuando murió, fue una gran pérdida para la galaxia. Si siguiera vivo hoy día,
sería tan famoso como cualquier miembro del Consejo en nuestro lado de la
frontera.
Con eso no quiero menospreciar a los demás que nos
acompañaron, en absoluto. Todos ellos eran excepcionales. Atuarre, la triani, y
su cachorro, Pakka. Rekkon los recogió y sacó lo mejor de ellos. Apuesto que
incluso habría logrado sacar algo bueno de esa comadreja biliosa de Torm. Podrían
haber enseñado dos o tres cosas a algunas de las escuadras de comandos que he
liderado.
Y luego estaban los droides, Bollux y Max Azul. Me
caían mejor que muchos orgánicos. Pero eso es otra historia.
Entramos y salimos de una de las prisiones más
terribles en las que he tenido la mala suerte de estar.
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
Eh, una deuda de vida funciona en ambos sentidos. Por supuesto, no podemos
llevarnos todo el mérito. Sólo la mayor parte de él.
Na’al: ¿A
qué se refiere?
Solo:
Bueno, ese jefecillo… ¿Hirkugg?
¿Hirgix?
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
Gracias. Hirken. Cometió el clásico error. Puso todas sus fichas a un número y
salió perdiendo. Era esa unidad de dirección suya. Cuando hice que Uul-Rha-Shan
le disparara por error, se puso en una espiral de sobrecarga. Él era el
guardaespaldas de Hirken, un tipo duro de pelar. Pero con un solo disparo, se
cargó la caja de Hirken y todo se derrumbó sobre nuestro amigo. Los equipos de
salvamento probablemente aún estén recogiendo escombros.
Na’al:
No le termino de seguir...
Solo:
Todos los circuitos estaban controlados como sistemas esclavos por esa unidad
en el cinturón de Hirken. Bum. Se acabó la instalación correccional de alta
tecnología. La cosa despegó de la superficie del planeta y casi entra en órbita.
Hubo muchas muertes, pero gracias a la agilidad mental de Atuarre, muchos de
nosotros logramos escapar. No nos detuvimos hasta que llegamos a la nueva base
de Jessa.
Organa Solo:
¿Y entonces?
Solo:
Mantuve mi parte del trato. Doc mantuvo la suya. ¡Y el Franquicia Luchadora de Soles vuela de nuevo! (Con la mano, imita una nave volando a toda velocidad. Todos ríen.)
***
Na’al:
Después de que escaparan del Confín de las Estrellas y depositaran a los
prisioneros en Urdur, ¿qué hicieron entonces?
Solo:
Recuperarnos de la fiesta, principalmente. (Risas)
Bueno, Chewie y yo decidimos quedarnos en la base de Doc por un tiempo. Jess y
yo habíamos acordado que ella repararía el Halcón
y yo iba a hacerle cumplir su palabra.
Organa Solo:
Apuesto a que sí.
Solo:
¿Quieres dejarme contar esta historia, querida?
Na’al:
¿Qué hicieron después de eso?
Solo: El
wookiee y yo teníamos buenos recuerdos de Rampa. Una de nuestras primeras
carreras importantes fue transportar nieve por los Rápidos de Rampa. Ya sabes,
ahora que está tan contaminado, todo el planeta es bastante tóxico. Los
contrabandistas... quiero decir, los honrados
hombres de negocios sacamos un buen
dinero transportando agua, hielo, nieve... y cualquier otra cosa que se pueda
beber. Por supuesto, como la Autoridad establece una regulación realmente
excesiva para ese tipo de cosas, tenemos que hacerlo discretamente, si entiendes lo que quiero decir...
Bueno, supusimos que la cosa no se pondría
demasiado seria. Y supongo que eso te dará una idea de lo poco que vale mi
sentido común.
Organa Solo:
No seas demasiado duro contigo mismo. Eso es tarea mía.
Solo: Ya
me he dado cuenta.
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
Bueno, en cualquier caso, después de que perdiéramos hasta la camisa en ese
negocio, nos quedamos a cambio unos cuantos montones de basura inútil.
Decidimos tomarnos las cosas con calma en uno de los mundos de la periferia.
¿Qué sabes acerca de Kamar?
Na’al:
Jamás escuché hablar de él.
Solo:
Entonces eres afortunado. Allí tienen unos nativos bastante extraños, los
Moradores de los Páramos. Al principio eran bastante amistosos, cuando
comenzamos a mostrarles holopelículas.
Na’al:
Cuénteme más.
Solo:
Bueno, teníamos un viejo holoproyector, y pensamos que, qué demonios, podría
resultar atractivo para los nativos. No tenían muchos conocimientos de
tecnología, pero fabricaban unos abalorios muy interesantes, y nos dejaban una
pila de ellos antes de cada función. Supuse que eso era todo lo que tenían... y
servía para matar el tiempo mientras lograba poner a punto el Halcón.
Na’al:
¿Funcionó?
Solo:
Por un tiempo. Pensaba que ya habíamos tenido bastante de malgastar nuestros
créditos en un vano intento de tener éxito en el Sector, pero después de que
los Moradores de los Páramos se volvieran intratables, decidimos regresar a los
brazos de la Autoridad.
Na’al:
¿Podría explicarme mejor eso? ¿A qué se refiere con “volverse intratables”?
Chewbacca: (Intraducible)
Solo: Ya
te he oído. Oh, bueno, apareció un viejo conocido, Sonniod. Le conocía desde
hacía tiempo, y solía dedicarse habitualmente a pasar de contrabando copias de
holopelículas. Él podría conseguirnos algunas de recambio y nosotros podríamos
arañar algunos créditos más. Pues bien, por la razón que fuera, no les gustó cuando
animamos el espectáculo.
Chewbacca:
Eh, no te pongas en plan crítico de arte. Empiezas a sonar como ese lingote
dorado de C-3PO.
Na’al:
¿Qué ha dicho?
Solo: No
te molestes en entenderle cuando se pone así de estupendo. En cualquier caso,
el cambio en el programa no les sentó muy bien y nos despedimos rápidamente de
Kamar. Hola de nuevo, Sector Corporativo. Estoy hambriento, ¿quién quiere
comer?
Chewie: (Gruñe en obvio asentimiento)
Na’al:
Desde luego, podemos tomarnos un pequeño descanso.
***
Solo: ¿Qué
más quieres saber?
Na’al:
Estábamos en el momento en el que decidieron regresar al Sector. ¿Aceptaron
otro trabajo de Ploovo Dos-Por-Uno?
Solo: (Pensando) No, ojalá hubiéramos pensado
en eso. Tal vez para entonces ya nos habíamos olvidado de ese dinko.
Chewbacca:
(Ríe)
Solo:
Supongo que tienes razón. Tal vez en ese momento Ploovo no habría sido
precisamente amistoso con nosotros. En cualquier caso, Sonniod me habló de un
trabajo para un cliente anónimo en Lur. Sólo que cuando llegamos allí, nos
encontramos con escoria. Esclavistas...
Na’al:
Creo haber escuchado algo acerca de eso.
Solo: En
fin, no tuvimos demasiada suerte. Debería haberme dado cuenta de que algo iba
realmente mal cuando no aparecieron cuando aterrizamos. Si alguna vez haces un
viaje de recogida de mercancía, asegúrate de que aparecen a plena vista para
recibirte.
Na’al:
Ah, bien.
Solo:
Resulta que su juego era este: contratan a un piloto para transporte a unos
pobres diablos -en esta ocasión eran lurrianos- y entonces cuando aterriza se deshacen
de él y toman su nave. Hacen la entrega y venden la nave. Obtienen ganancia por
partida doble. Pero cuando se enfrentaron a nosotros recibieron más de lo que
se esperaban. ¿Verdad, socio?
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo: El
tipo que dirigía el cotarro se llamaba Zlarb. Bueno, puede que no hayas oído
mucho acerca de él, pero no era ni la mitad que otras sucias escorias
esclavistas que conozco. Simplemente, Zlarb tenía contactos muy elevados en la
Autoridad. Y realmente tenía pinta de tipo duro. Pero no se daba cuenta de lo
útiles que pueden llegar a ser los droides.
Organa Solo:
Un momento, me deben estar engañando los oídos.
Solo:
¿Quieres dejarme terminar? Bollux y Max Azul nos ayudaron sobremanera en esos
momentos. Aunque la mayor parte del trabajo lo hicieron los propios lurrianos.
Aunque, en mi opinión, la muerte es poco castigo para los esclavistas.
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo: Ya
te he oído. Desde luego, eso nos dejaba con un saldo negativo del orden de
10.000 créditos. Y yo siempre reclamo mis deudas. Por suerte, antes de realizar
el Salto Final, Zlarb dejó algunas pistas.
Na’al:
¿Pistas para qué?
Solo:
Para ajustar cuentas con los tipos que pensaron que podían convertirme en
esclavista. Eso es lo que nos llevó a Bonadan, donde conocimos a Fiolla.
Na’al:
¿La auditora general?
Solo:
Bueno, entonces sólo era un agente independiente, pero enseguida me di cuenta
de que tenía la cabeza bien amueblada. (Mira
a Organa Solo) Por supuesto, nunca fue más que una buena compañera de
viaje, pero nos ayudó a salir de muchos líos.
Organa Solo:
(Ríe) Eras incorregible.
Solo:
¿¡¿Era?!?
Organa Solo:
Está bien, aún lo eres. Estás comenzando a sonar como Lando cuando fue a esa
escuela.
Na’al:
Oh, oh.
Solo:
Bueno, Magg, el socio de Zlarb, nos estaba persiguiendo. Resulta que también
estaba tomando por tontos a Fiolla y a toda la Autoridad, pero conseguimos
desenmascararle.
Chewbacca:
(Intraducible)
Na’al: (Para sí mismo) La próxima vez debería
traer un droide de protocolo.
Solo:
¿Eh?
Na’al: Preguntaba
que qué hicieron para ayudar a descubrirle.
Solo: Bueno,
fue un trabajo de los gordos, Fiolla y yo por un lado, y Chewie y los droides
por otro. Nos las vimos con Magg y sus comandos y terminamos todos enfrentados
en Ammuud.
Na’al: Tenía
entendido que llegó a conocer a Odumin...
Solo:
Ah, sí. Ese tipo... tenía más cerebro que muchos gobiernos de sector al
completo. Nos engañó a base de bien. Se hacía pasar por Spray, un estúpido y
despreocupado recaudador de Vinda y D’rag. Más gente a la que debíamos dinero.
Pero no pudo mantener su tapadera mucho tiempo.
Como iba diciendo, terminamos en Ammuud, en medio
de un desagradable asunto con rivalidades entre clanes. Salvé la vida de Mor
Glayyd, ¿sabes?
Na’al:
¿En serio? Tengo entendido que está abriendo puertas a la Nueva República.
Solo:
Bueno, supongo que dejé buena impresión en él y en su hermana.
Na’al:
¿Una hermana?
Solo: Su
hermana había sido atacada por Gallandro, un secuaz Espo.
Na’al: ¿Ese Gallandro? ¿El que acabó con la
banda Malorm?
Solo:
Sí. Lo hizo para provocar que el Mor lo retara en duelo. Un duelo
convenientemente fatal.
Na’al:
Necesitaré que profundice en esto más adelante. Por favor, continúe.
Solo: Bueno,
Magg trató de atraparme una última vez. Yo creía que para entonces ya llevaría
tiempo muerto, pero no hubo tanta suerte. Por supuesto, entonces apareció la
Autoridad.
Na’al:
¿Qué hizo entonces?
Solo:
Bueno, por abreviar una larga historia, después de que yo derrotara en duelo a Gallandro,
la Autoridad decidió pagarme y dejarme marchar.
Na’al:
¿Usted venció en duelo a Gallandro?
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
Sí, lo hice. (A Chewie) Ya lo sé...
Chewbacca:
(Intraducible)
Solo:
Sí, sí, ahora iba a contárselo. Odumin trató de jugárnosla, pero cuando
mostramos que teníamos las mejores cartas, se vieron obligados a hacer las
paces con nosotros. De todas formas, sabíamos que había llegado el momento de
largarnos de allí.
Na’al:
Eso es todo un logro. ¿Fue justo antes de que fuera a trabajar para Jabba?
Solo:
Oh, no. La siguiente gran historia terminó llevándonos al wookiee y a mí en un
viaje allá donde Xim el déspota perdió el sombrero. Porque tenía un sombrero...
¿no?
Na’al:
Bueno, en realidad él tenía...
Solo: Es
una broma.
Na’al:
Oh.
Solo:
Esa fue una de las aventuras más peligrosas que jamás hemos tenido. Pero esa es
otra historia...
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