El legado de Riboga
Morrie Mullins
Saludos, amigos. Os habla Ryk
Osentay, informando para “El Ojo de Cularin”. Hoy estoy en directo desde Tolea
Biqua, el pequeño lugar de maldad y vileza de Cularin.
Ryk sale del portal en el que se encontraba y comienza a caminar
por una estrecha calle de Tolea Biqua. Brillantes luces de neón destellan sobre
su cabeza, y un deslizador pasa disparado junto a él, peligrosamente cerca,
haciéndole girar sobre sí mismo un círculo completo antes de continuar
caminando como si no hubiera ocurrido nada. Pasa junto a un trío de tipos
sospechosos que se alejan de la cámara entre susurros frenéticos. Otros
individuos, en su mayor parte ajenos a su presencia, pasan junto a él por la
calle. Ryk no parece tan alto cuando está de pie junto a otras personas que
cuando está sentado. Se gira, mira por encima de su hombro, y habla sin
ralentizar su marcha.
Como saben, Holodifusión Central
de Cularin no ha sido autorizada a conectar en directo desde Tolea Biqua desde
la desaparición de Melanda Forswoth hace más de un año. Melanda sigue
desaparecida, y sólo gracias a serias negociaciones (la palabra “Súplicas” aparece por la parte inferior de la pantalla)
he podido obtener permiso para venir aquí con un remoto. Sin embargo, tengo
algunas ventajas que Melanda no tenía. Por ejemplo, me he puesto en forma.
La pantalla muestra: “También tiene un equipo de seguridad cuya
existencia desconoce apostado a unos 500 metros justo sobre su cabeza.”
Estoy hoy aquí para encontrar
personas que me hablen acerca de Riboga. ¿Qué significó el hutt para Cularin, y
qué legado dejó atrás? No hay ningún otro lugar donde este legado pueda ser más
aparente que Tolea Biqua, la ciudad que prácticamente fue construida por el
hutt. Apuestas, cantinas, toda clase de vicios... son por lo que se conocía a Tolea
Biqua. Por lo que aún es conocido, en gran medida. Estas calles son muy
peligrosas para un individuo incauto. Afortunadamente, Ryk Osentay no es en
absoluto un incauto.
“Por eso desconoce que hay una nave con una batería turboláser de
repetición directamente sobre su cabeza.”
Muy bien. ¿Estamos preparados?
Veo allí a alguien que podemos entrevistar.
Ryk corre cruzando la calle para acercarse a una figura apoyada
contra la pared, sentada con las piernas pegadas al pecho y la frente
descansando sobre las rodillas. Bajo la iluminación de la cámara, vemos un par
de cuernos surgiendo de cada sien... un devaroniano.
Ryk: Disculpe, señor. Soy Ryk
Osentay, de “El Ojo de Cularin”, y me gustaría hablar con usted. ¿Tiene unos
minutos?
Devaroniano: (Sin levantar la cabeza) ¿Eh?
Ryk: Me gustaría hacerle algunas
preguntas sobre la época en la que Riboga estaba aquí. ¿Estaba usted aquí
cuando Riboga gobernaba el inframundo criminal de Cularin con puño de hierro?
Devaroniano: (Aún sin levantar la cabeza) ¿Eh?
Ryk: ¿Señor? ¿Está usted despierto?
Devaroniano: Pareces tonto. No quiero
hablar.
Ryk: ¡Pero soy Ryk Osentay, de “El
Ojo de Cularin”!
Devaroniano: (Sin levantar todavía la mirada) Creía que ése era el programa de
Yara. ¿No eres más que uno de esos perritos falderos que ella tiene alrededor
para salir y hacer el trabajo estúpido cuando está demasiado ocupada?
Ryk: (Ruborizándose) En realidad, “El Ojo” es ahora mi programa. Yara
pidió ser reasignada permanentemente a la mesa de noticias para ocuparse de los
asuntos relativos a la guerra, dejándome a mí los temas de interés local. Y
ciertamente Riboga es un interés local, ¿no le parece?
“No es que Ryk nos caiga realmente bien, eso sí. Tiene un ego del
tamaño del presupuesto para maquillaje de Yara, y para él la “preparación” es
lo que la gente hace en la cocina. Nos ha estado insistiendo en dejarle ir a
Tolea Biqua desde que vio los índices de audiencia que obtuvo la desaparición
de Melanda.”
Devaroniano: Cuanto menos diga la
gente de ese bicho raro hinchado y lame-barro, mejor. De todas formas, ¿por qué
galaxias te importa?
Ryk: Porque, como nos enseña el
Código Jedi, realmente el mal nunca se crea o se destruye, sino que sólo cambia
de forma.
El devaroniano alza la mirada. Sus ojos son totalmente negros, y
el lugar donde solía estar su nariz está ocupado por un agujero sangriento.
Mira fijamente a Ryk.
Devaroniano: Uno, eso no es el
Código Jedi. Ni siquiera es algo que leerías en un souvenir Jedi. Dos, estás
empezando a hacer que Yara parezca una doctora en astrofísica. ¡Ahora, márchate
antes de que atraiga la cólera de los cielos sobre mi cabeza sólo para
conseguir que te vayas!
La imagen se vuelve negra. Aparecen las palabras “Ryk no llegó a
entender realmente ese último comentario”, y luego desaparecen mientras la
imagen funde a Ryk acercándose a un grupo de tres rodianas, cada una de un tono
distinto de verde, y un wookiee bastante alto.
Ryk: Hola, soy Ryk Osentay, de “El
Ojo de Cularin”.
Rodiana 1: ¡Ni hablar! ¡No
fastidies, tío!
Rodiana 2: Tú tampoco eres Yara.
¿Qué pasa aquí? O sea, es como si siempre aparecemos en “El Ojo”, pero nunca
con Yara, o sea. ¡Yo solía ser su mayor admiradora, antes de que fuera y se
pusiera toda seria y comenzara a perseguir túnicas! Aunque sigue siendo mejor
que tú.
Rodiana 3: ¿No solías presentar
carreras de vainas desde la línea de boxes? ¿No fuiste tú el que dejó caer aquella
vez un micrófono en el motor de ese dug malhumorado, y recibió una paliza en
directo?
“Además de ser un egocéntrico, Ryk no es particularmente listo.
Por ejemplo, estamos seguros de que no se molestará en revisar la versión
completa de este segmento. Sólo querrá el vídeo con sus imágenes, para ver qué
aspecto tiene. En serio, ¿qué clase de persona intenta duplicar las tasas de
audiencia conseguidas por una desaparición en directo volviendo al mismo lugar
donde ocurrió la desaparición? Si Yara aún estuviera al mando, las cosas irían
mejor. No podemos creernos que acabemos de decir eso.”
Ryk: Hmm, no. Ese no era yo. Y esto
ya no es el programa de Yara, es mío. Soy Ryk Osentay, el nuevo presentador de “El
Ojo de Cularin”.
Rodiana 2: ¿Sabes que somos como, o sea,
unas de las últimas personas que vieron a esa Melanda antes de que ese Falsswon
la atrapara? ¡Tío, qué fuerte! Deberías haber visto el aspecto que tenía aquel
día. Con todo el calor y eso. ¿Es por eso que estás aquí?
“Ryk no se molestó en estudiar el vídeo de Melanda antes de salir.
Nosotros sí. Los editores confirman que esas son las mismas personas que
Melanda entrevistó antes de desaparecer.”
Ryk: (Ligeramente alterado) No estoy aquí por Melanda. Está
desaparecida, así que actualmente no está trabajando en el programa. Me
gustaría hablar con ustedes acerca de Riboga, el hutt que en otro tiempo
controlaba el sistema.
Wookiee: Grunt. Grunt.
“Veamos si Ryk cae en la trampa.”
Ryk: (A la cámara) Mi traductor se ha estropeado. ¿Qué es lo que ha
dicho el felpudo?
Wookiee: He dicho: “Grunt. Grunt.”
Es una táctica estándar que uso para decidir si estoy tratando con un idiota
que depende de un traductor. Ahora ha funcionado dos veces contra personas de
tu cadena. Sin embargo, si insistís en ser estúpidos, os concederé vuestra
entrevista. Llamadlo simpatía. Soy Nerrowr. Estas son mis compañeras, Nesha,
Besha y Kesha.
Ryk: Ah. ¿Trillizas?
Nesha: Hmm, no.
Ryk: ¿Gemelas?
Besha: O sea, no. No somos
parientes. Sólo somos rodianas. A menos que tú seas pariente de todos los demás
humanos, o sea.
Ryk: Bueno, ¿qué hay entonces de la
entrevista? ¿Qué pueden decirme sobre Riboga?
Nerrowr: ¿Qué quieres saber? Todos
trabajamos para él, al menos durante un tiempo, antes del surgimiento de Nirama
como la figura más poderosa del sistema.
Ryk: El criminal más poderoso, querrá
decir. Estoy seguro de que el Maestro Lanius Qel-Bertuk de la Academia Jedi es
más poderoso que Nirama.
Nerrowr: Quería decir lo que he
dicho. ¿Quieres oír lo que tengo que decir, o no?
Kesha: Es patético. Tiene tanto
carisma como los dedos de los pies de Yara. Si llega.
Ryk: ¿En serio? Pensaba que Riboga
rezumaría carisma. Después de todo, era una figura criminal bastante temida.
Por supuesto, nunca llegué a conocerle.
Nesha: No estaba hablando de Riboga.
Ryk: (Alterado) Centrémonos en la tarea, damas. Y caball... wookiee.
Estamos aquí para hablar de Riboga. ¿Qué pueden decirme?
Mientras hace la pregunta, una joven pasa a trompicones, golpeando
la cámara y cayendo al suelo. Su rostro es un caos de sangre y suciedad, y le
han afeitado el cabello de un lado de la cabeza. Gimotea, luego se pone en pie
y comienza a avanzar tambaleante por la calle. La cámara la sigue, aunque
seguimos escuchando la entrevista de Ryk.
Nerrowr: Riboga era un individuo muy
poderoso, muy amenazador. Se marchó de Cularin, pero sólo del modo que un hutt
llega a “marcharse” realmente de un lugar que ha ocupado. Aún hay gente en
Cularin que es leal a Riboga, y seguirán siéndolo hasta que mueran, o hasta que
él muera.
Ryk: Entonces, cuando usted dice que
en realidad no se ha marchado, ¿qué quiere decir? ¿El hutt aún está aquí?
Nerrowr: No. He dicho que se marchó
de Cularin. Hablar contigo es inútil. Esta conversación ha terminado.
La cámara continúa siguiendo a la joven tambaleante. Ella mira
hacia atrás y la imagen se congela. Su rostro se aparta a la mitad izquierda de
la pantalla, y un rostro familiar aparece a su lado, en la mitad derecha de la
pantalla. Es Melanda Forswoth, en una imagen de las entrevistas que llevó a
cabo el día anterior de desaparecer en Tolea Biqua. No cabe duda: las dos
mujeres son la misma.
Interior, estudios de Holodifusión Central de Cularin. Yara y Ryk
están sentados juntos en la mesa del presentador. Las dos imágenes de Melanda
cuelgan suspendidas en el aire tras ellos.
Ryk: Me complace informar de que
Melanda está en un hospital de Cularin, y parece estar recuperándose
físicamente. No está claro dónde ha estado, o qué le han hecho, y el estado de
su recuperación psíquica es dudoso. Bien podría permanecer como un vegetal
ambulante por el resto de su vida, pero al menos sigue con vida. Y, me complace
decir, todo ha sido gracias a mi genial reportaje de investigación.
Yara le mira y fuerza una sonrisa.
Yara: Por supuesto, Ryk. Bien hecho.
Y estoy segura de que te alegrará saber que vas a volver a Tolea Biqua la
semana que viene para preguntar a más gente acerca de Riboga. ¿No te parece
divertido?
Ryk: ¡Apenas puedo esperar!
“Y lo triste es que estamos bastante seguros de que lo dice en
serio.”
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