Páginas

Elige tu propia aventura

miércoles, 19 de junio de 2013

Sólo los droides sirven al Creador (V)


Casi una hora más tarde, Tinian estaba de pie junto al hombro de Agapos, y Chen estaba junto a la estación del piloto. Todos se habían puesto máscaras de oxígeno y botellas auxiliares. El indicador de la botella de Chen ya brillaba en rojo.
Les había faltado muy poco –escalofriantemente poco- cuando salieron del hiperespacio y se encontraron con una nave imperial justo a su cola. Chen había realizado apresuradamente su segundo salto. Podrían aparecer a años luz de distancia del Punto Tekra.
Coqueta había aislado los tanques de oxiagua. Chen había tensado el tejido en un frasco de muestras, y luego entregó los tanques a Agapos.
-Protegeos los oídos. -Agapos colocó boca abajo una botella de recogida e introdujo los conectores.
Tinian retrocedió hasta el mamparo opuesto y apretó ambas manos a los lados de la cabeza.
Entonces Agapos gritó. Las vibraciones ultrasónicas resonaron por los mamparos elípticos. Tinian notó cómo su cuerpo vibraba y sus mejillas enrojecían. Se sentía mareada. Chen gemía de dolor.
Agapos respiró hondo.
-¿Estáis bien?
De modo que era así como los habría matado. Chen aulló.
-Estoy bien -replicó ella-. ¿Y tú?
-¿Funciona? -trinó Coqueta.
Agapos agitó la botella de recogida.
-De esta cantidad de oxiagua, esto es todo lo que puedo conseguir. Sí. Otro regalo. Éste, de agradecimiento.
-Si estamos en camino -murmuró Tinian con amargura-. Adelante.
Agapos abrió la boca como para dirigirse a ella de nuevo, y luego sacudió la cabeza y se alejó.
Tinian se sujetó a su asiento.

***

Chen estaba dirigiendo la Wroshyr a una base de atraque cuando otra nave apareció en sus sensores.
-¡Él otra vez! -gritó Tinian a través de su máscara de oxígeno.
Chen soltó una mezcla de gruñido y ladrido.
-Prepárate para salir corriendo -advirtió a Agapos. Él había estado hablando con ella mientras las botellas de recogida se vaciaban de nuevo, protegiéndola del aburrimiento y el miedo. Él comprendía el dolor; su compañera de unión también había muerto. Simpatizaba con su sueño recurrente de correr frenéticamente, esquivando los disparos láser, sin atreverse a mirar atrás. Y le había dejado algo en lo que pensar: "Tanto el amor como la lealtad deben sostenerse mediante el sacrificio Hasta que podamos aprender a devolver bien por mal, no habrá tranquilidad."
Poco práctico, pero ennoblecía su memoria de Daye. A ella le habría gustado abrazar a Agapos, pero sus manos estaban ocupadas por los controles de maniobra. Todavía estaba aprendiendo a pilotar este cubo oxidado.
-¿Van a reequiparos? –preguntó Agapos.
-Están a la espera. -Chen explicó su necesidad y las prisas.
La escotilla lateral sonó. Tinian desbloqueó el cierre.
-Adiós -dijo por encima del hombro-. Buena suerte.
-Os doy las gracias...
La escotilla se abrió de golpe. Agapos saltó fuera de la nave. Tres personas entraron de un salto. Chen ladró.
-Bajo la cubierta -tradujo Tinian-. Deprisa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario