Un carroñero muy extendido

Borcatu

Un carroñero muy extendido
Phil Brucato

Sólo Zazu sabe cómo los borcatu llegaron a estar tan dispersos por toda la galaxia como están. Se ha rastreado el origen de estos animales de mal genio que rebuscan en la basura hasta Escabar, pero parece que se colaron en alguna de las primeras naves de ese planeta y se propagaron por los mundos conocidos. Su tasa de reproducción es bastante elevada; su umbral de humor bastante bajo.

En su planeta natal, los borcatu se originaron en los desiertos septentrionales de Serhan. Su grueso costado puede haber evolucionado para protegerlos de los elementos y las violentas tormentas de arena por las que son conocidos esos desiertos. Las duras garras y las fuertes mandíbulas de esas criaturas sin duda estaban destinadas para excavar madrigueras y abrir conchas. Pero cuando los mercaderes de Khrassh cruzaron los desiertos en su camino a los recién abiertos espaciopuertos, algunos borcatu treparon a bordo y se colaron de polizones en las naves que despegaban. Las crías de borcatu, que miden sólo escasos centímetros al nacer, son difíciles de detectar en las salas de máquinas, pozos de mantenimiento y conductos de soporte vital. Para cuando los mercaderes descubrieron su carga no declarada, varios borcatu ya habían salido hacia otras naves. Y así las alimañas se expandieron...

“Alimaña” tal vez sea una palabra demasiado fuerte. Para ser carroñeros, los borcatu son bastante limpios y dejan pocos residuos a su paso. Nacidos en el desierto, los borcatu son eficientes por naturaleza. Por esta razón, son difíciles de detectar a menos que la realice un escaneo sobre la propia nave. Cuando la manada se hace demasiado grande –entre 5 y 50 miembros, dependiendo del tamaño de la nave-, gran parte de la misma se baja en el siguiente puerto. A pesar de ser rechonchos, los borcatu son rápidos; los estibadores odian con fiereza a esas bestias.

En los 150 años estándar que han pasado desde que los puertos de Escabar se abrieron al comercio interestelar, los borcatu se han extendido desde los Mundos del Núcleo a los Territorios del Borde Exterior. Las naves pequeñas tienen pocas probabilidades de ocultar más de uno o dos (si es que llegan a tener alguno), pero las naves capitales pueden tener docenas de ellos a bordo y ni siquiera saberlo. Esos monstruos viven vidas cortas –raramente más largas de un año estándar-, y cuando uno muere, los demás se lo comen. ¡Qué existencia tan maravillosa!

¡Y sus modales! ¡Oh, sus modales! Los borcatu son bichos susceptibles, que muerden a cualquiera que se acerque a ellos. Para ser tan corpulentos como son, los borcatu se mueven rápidamente, y encontrarlos en una pila de desechos o en un pozo oscuro es algo muy difícil. Cuando la comida es difícil de encontrar, también luchan entre ellos, y los ganadores se comen a los perdedores.

Desde los lodos de Arramanx a los bosques de Kashyyyk, los borcatu están en todas partes. Sólo Zazu sabe cómo se extienden tan rápido. Sólo Zazu sabe cómo nos libraremos de ellos...