martes, 19 de mayo de 2009

Ascensión y caída de Darth Vader (y XXVIII)

Epílogo

Inicialmente, hubo oscuridad para Anakin Skywalker, un reino sombrío ilimitado, como un universo sin estrellas. Pero luego, desde algún lugar en el límite de su consciencia, percibió una luz distante, temblorosa, y luego escuchó una voz. Anakin.
La voz era familiar.
Aunque Anakin ya no tenía cuerpo ni boca con la que hablar, de algún modo respondió. ¿Obi-Wan? Maestro, lo siento. Lo siento tanto, tanto...
Anakin, escucha atentamente
, interrumpió Obi-Wan, y Anakin fue consciente de que la distante luz brillaba cada vez más fuerte, o más cerca, o quizá ambas cosas. Estás en el mundo eterno de la Fuerza, pero si quieres volver a visitar alguna vez el espacio corporal, entonces aún me queda una cosa que enseñarte. Un modo de ser uno con la Fuerza. Si eliges este camino a la inmortalidad, entonces debes escuchar ahora, antes de que tu consciencia se desvanezca.
Anakin sabía que estaba más allá de toda redención.
Pero, Maestro... dijo. ¿Por qué yo?
Porque terminaste con el horror, Anakin, dijo Obi-Wan. Porque cumpliste la profecía.
La luz era ahora muy brillante.
El primer pensamiento de Anakin fue que podría ser capaz de volver a ver a sus hijos.
Gracias, Maestro, dijo.


Tomando la lanzadera imperial, Luke Skywalker había escapado de la Estrella de la Muerte con los restos de su padre sólo un momento antes de que la estación de combate estallara. Tras aterrizar en la Luna Santuario, Luke preparó un funeral privado en un claro del bosque.
La noche había caído cuando Luke colocó la armadura con el cuerpo de Anakin Skywalker sobre una pila de leña.
-Quemo su armadura y con ella el nombre de Darth Vader –dijo, encendiendo la pira-. Que el nombre de Anakin Skywalker sea una luz que guíe a los Jedi en las generaciones futuras.
Luke no era consciente de los espíritus que le observaban desde las sombras del frondoso bosque. Pero más tarde, cuando se reunió con sus aliados para celebrar su victoria en el pueblo sobre los árboles que era la morada de los ewoks, Luke vio tres temblorosas apariciones materializarse en la oscuridad. Eran Obi-Wan Kenobi, Yoda... y su padre, Anakin Skywalker.
El Jedi había regresado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario