12 – Epílogo
Tras una rápida escaramuza,
finalmente vencéis a los soldados exploradores imperiales enviados para
capturaros. Puede que haya más patrullas de tierra acechando cerca de las
ruinas de la base, así que decidís alejaros más en el denso bosque.
Miráis hacia atrás, a los
humeantes restos de la Base Edan. No tiene sentido regresar allí; las ruinas
pronto estarán rebosantes de tropas imperiales. La cuña blanca del Destructor
Estelar sigue flotando por encima del planeta. Vuestra mejor opción es caminar
por el bosque, buscando un asentamiento u otros rebeldes que hayan logrado
escapar.
No va a ser fácil sobrevivir ahí
fuera. Sabéis que el bosque es el hogar de algunos depredadores bastante
peligrosos, como los feroces gatos de las nieves. Y con ese Destructor Estelar
en órbita, seguro que el Imperio enviará más tropas terrestres. Tal vez
pretendan peinar la zona para atrapar a rebeldes fugados. O tal vez el Imperio
esté en Edan II para un propósito mucho más siniestro.
- Fin de la aventura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario