70
-¿Estás loco? -grita Luke-. ¡Detente!
-¿Qué? -responde Gideon también gritando. Se gira para mirar a Luke. El buggy de supervisión se tuerce hacia la pared y sus faros iluminan la esquina de un cruce. Una figura blanca salta fuera de su camino.
-¡Saltad! -brama Luke. Agarra a Sidney y salta fuera del banco. El pada sale volando hacia la oscuridad. Luke cae sin idea de dónde deberían estar sus pies.
El buggy de supervisión choca contra el muro. En el mismo instante, Luke golpea el suelo. No puede diferenciar el trueno del choque del tractor de la sacudida de su cuerpo al golpear la roca. Un relámpago ilumina el túnel, y entonces Luke siente como rueda por el suelo. Aunque ha perdido la orientación, tiene la vaga idea de que su impulso le lleva hacia el buggy en llamas. Un resplandor naranja brilla con más fuerza en cada giro.
Finalmente, Luke se detiene, mareado y magullado. Lleva su mano hacia el sable de luz. Antes de que sus dedos entumecidos lo desenganchen, una bota blanca le pisa el brazo. Mira hacia arriba, hacia una luz cegadora.
-¡No te muevas! -ordena la voz electrónica de un soldado de asalto.
Luke escucha al menos a otros dos acercándose.
Luke es lo bastante listo como para escuchar al soldado de asalto, al menos por ahora. Esta aventura ha acabado hasta que escape del Gobernador-General Parnell. Pero eso es otra historia... Vuelve a la sección uno y prueba de nuevo.
-¿Estás loco? -grita Luke-. ¡Detente!
-¿Qué? -responde Gideon también gritando. Se gira para mirar a Luke. El buggy de supervisión se tuerce hacia la pared y sus faros iluminan la esquina de un cruce. Una figura blanca salta fuera de su camino.
-¡Saltad! -brama Luke. Agarra a Sidney y salta fuera del banco. El pada sale volando hacia la oscuridad. Luke cae sin idea de dónde deberían estar sus pies.
El buggy de supervisión choca contra el muro. En el mismo instante, Luke golpea el suelo. No puede diferenciar el trueno del choque del tractor de la sacudida de su cuerpo al golpear la roca. Un relámpago ilumina el túnel, y entonces Luke siente como rueda por el suelo. Aunque ha perdido la orientación, tiene la vaga idea de que su impulso le lleva hacia el buggy en llamas. Un resplandor naranja brilla con más fuerza en cada giro.
Finalmente, Luke se detiene, mareado y magullado. Lleva su mano hacia el sable de luz. Antes de que sus dedos entumecidos lo desenganchen, una bota blanca le pisa el brazo. Mira hacia arriba, hacia una luz cegadora.
-¡No te muevas! -ordena la voz electrónica de un soldado de asalto.
Luke escucha al menos a otros dos acercándose.
Luke es lo bastante listo como para escuchar al soldado de asalto, al menos por ahora. Esta aventura ha acabado hasta que escape del Gobernador-General Parnell. Pero eso es otra historia... Vuelve a la sección uno y prueba de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario